Publicado el 26-05-2025 en Posgrado
La Universidad como motor de cambio en proyectos de cooperación internacional
Una carrera impulsa la formación de profesionales capaces de evaluar y diseñar iniciativas que respondan a los grandes desafíos globales desde una perspectiva crítica y anclada en el territorio.
Para comprender la relevancia de la cooperación internacional es necesario primero que imaginemos el mundo como una gran comunidad donde los países, como vecinos, enfrentan problemas que no respetan fronteras: una pandemia, el cambio climático, la pobreza extrema, conflictos que generan refugiados, el crimen organizado, etc. Ningún país, por poderoso que sea, puede resolver estos desafíos por sí solo.
Se trata, en esencia, del conjunto de acciones y esfuerzos realizados voluntariamente por dos o más actores internacionales (principalmente Estados, pero también organizaciones internacionales, ONGs, e incluso el sector privado y la sociedad civil) para alcanzar objetivos comunes o abordar problemas compartidos que trascienden los límites nacionales. Es un campo dinámico, complejo y no exento de desafíos (intereses políticos, asimetrías de poder, eficiencia), pero indispensable para abordar los grandes retos globales del siglo XXI.
Por esta razón, la Escuela de Posgrado de la Universidad Católica de Córdoba presentó la Especialización en Cooperación Internacional, cuya primera cohorte se puso en marcha en mayo. Entrevistamos a la docente Silvana Rufail, experta en la evaluación de proyectos de cooperación internacional, materia que dicta en esta carrera. Se ha desempeñado como directora de Enlace con PNUD y UNOPS en Argentina, impulsando mecanismos de monitoreo y evaluación con enfoque participativo e inclusivo, entre otras actividades.
¿Qué es un proyecto de Cooperación Internacional? ¿Tenemos ejemplos en nuestra región?
-Un proyecto de Cooperación Internacional es una iniciativa en la que actores de distintos países colaboran para resolver desafíos comunes: desarrollo local, salud, cambio climático, educación, entre otros. No se trata solo de transferir fondos, sino de compartir conocimientos, tecnologías, capacidades y estrategias.
Por ejemplo, en nuestra provincia ha tenido un impacto significativo el programa PNUD + Gobierno de Córdoba para la implementación de las TIC´s en políticas públicas reflejado en plataformas como ciudadano digital. Asimismo, las mejoras en el Observatorio Ambiental Municipal en el marco del proyecto Respira Córdoba, en colaboración con la Unión Europea entre otros tantos proyectos en diversas áreas.
En tiempos en los cuales presidentes como Donald Trump retiran a su país de la Cooperación Internacional, ¿por qué es importante mantenerla?
-El retiro de un actor clave como EE.UU. implica una reducción drástica de fondos, debilitamiento de redes multilaterales y riesgo de que ciertas agendas (como el cambio climático o la salud global) pierdan respaldo. También es cierto que, en términos geopolíticos, actores como China y la UE están en condiciones de ocupar esos espacios con nuevos programas o ampliando el alcance de programas ya existentes.
Esto refleja una vez más la volatilidad que muchas veces sobrevuela los flujos de cooperación internacional, y la importancia de generar conocimiento y aprendizajes para que los programas sean eficientes, eficaces, replicables por parte de distintos actores y, fundamentalmente, acompañen el desarrollo de capacidades locales, evitando cualquier tipo de dependencias estructurales. Fomentar una cultura de la evaluación sin dudas contribuye a esta perspectiva, sin perder de vista que cooperar es invertir en un futuro común. Los desafíos globales no se resuelven desde el aislamiento.
En este contexto, ¿por qué es relevante una materia sobre Evaluación de Proyectos en la especialización?
-Porque no alcanza con hacer proyectos “bien intencionados”: necesitamos saber si están funcionando, cómo, para quiénes y con qué efectos reales. Evaluar es observar con profundidad, identificar aprendizajes, rediseñar lo necesario y rendir cuentas de manera transparente. Es una herramienta clave para la mejora continua que aporta a su vez legitimidad a las intervenciones.
¿Cuáles son las tendencias actuales en el enfoque de la evaluación dentro del campo de la cooperación?
-Hoy se busca una evaluación más participativa, transformadora y contextualizada. Las agencias ya no sólo piden datos cuantitativos, sino que exigen comprender los procesos humanos detrás del cambio. En este sentido, además de observar los estándares internacionales, se habla cada vez más de evaluaciones sensibles al contexto y al territorio, teniendo en cuenta la perspectiva local y la co-creación de criterios de evaluación.
¿Qué rol puede jugar la Universidad en este nuevo paradigma?
-La universidad es un actor clave: no sólo como un sujeto activo de proyectos y programas de cooperación sino que, además, puede formar profesionales con visión crítica, aportar rigurosidad técnica, generar evidencia y facilitar espacios de diálogo y reflexión entre comunidades, actores gubernamentales y agencias que confluyen en un proyecto para lograr distintos objetivos de desarrollo.
¿Cómo se aborda esto en la materia que dictás en el posgrado?
-La propuesta de nuestra materia implica trabajar fundamentalmente con casos reales de proyectos y sus evaluaciones, y a partir de allí, identificar cómo fueron pensadas estas intervenciones, como fueron gestionados, y poder relevar aquellos efectos no planificados pero relevantes en la construcción de conocimiento. También nos permite rastrear los enfoques, criterios y políticas de evaluación que priorizan los principales actores de la cooperación internacional en la actualidad.
¿Cuáles son los principios que guían la evaluación en la Cooperación Internacional?
-Los principios más reconocidos por las agencias y organismos internacionales son: pertinencia, eficacia, eficiencia, sostenibilidad, impacto; a los que progresivamente se suman nuevos ejes que tienen que ver con una valoración de la diversidad epistémica y cultural en la que se sitúa la evaluación, así como la participación activa de los actores involucrados en el proyecto, no sólo como informantes, sino como constructores del proceso evaluativo.
Seguí formándote. Estudiá la Especialización en Cooperación Internacional en la Escuela de Posgrado de la UCC.
Para conocer más sobre esta carrera coordiná una entrevista acá.